La presencia una vez más de algas potencialmente tóxicas en la Laguna «La Brava», detectadas a través de los estudios que llevan a cabo distintas instituciones, impulsó a la Dirección de Gestión Ambiental de la Municipalidad a realizar una serie de recomendaciones. Una de ellas, que no se consuman los peces que se extraigan en ese espejo de agua y otra, no entrar en contacto con las floraciones de cianobacterias toxígenas.

"Si bien no contamos aún con un sistema de información de su impacto en la salud de las poblaciones expuestas, sabemos que toda floración de cianobacterias debe ser considerada, en principio, como potencialmente tóxica y, por lo tanto, como un problema de salud pública que requiere acciones para minimizar su efecto negativo en las comunidades en riesgo", declaró el titular de Gestión Ambiental, ingeniero agrónomo Pedro Platz.

En materia de antecedentes por esta situación planteada hay que remitirse a enero de 2018 cuando se registró una mortandad de peces. A partir de allí se iniciaron estudios precisos para establecer cuál era la problemática, registrada principalmente en verano, los cuales se continuaron en el tiempo participando instituciones públicas y privadas. Se supo que la presencia de floraciones de cianobacterias toxígenas provocaba una quita de oxigeno al agua y allí se generaba la mortandad de peces.

Fue entonces cuando el Club de Pesca Balcarce, que tienen a su cargo la guarda de la laguna, prohibió la pesca deportiva para recuperar la población de peces. Para ello, el Ministerio de Agroindustria bonaerense, a través de la Estación Hidrobiológica de Chascomús, hizo tareas de repoblamiento con huevos y larvas de pejerrey.

Indicó Platz que "las cianobacterias han proliferado en los ambientes acuáticos en coincidencia con el alto grado de eutrofización antropogénica y el cambiante ambiente acuático, modificado por el cambio climático global. Tanto las cianobacterias como las cianotoxinas pueden generar efectos adversos en la salud del hombre y los animales".

Asimismo, se cree que este grave problema sanitario presenta sintomatologías similares a otras afecciones por lo que es posible que no sea correctamente diagnosticado.

"Teniendo en cuenta los antecedentes descriptos, y la presencia actual de cianobacterias en la laguna, se recomienda a la población, turistas y aficionados a la pesca no entrar en contacto con ellas", advirtió el funcionario a través de un comunicado del área que conduce.

También planteó a manera de consejo que se evite consumir peces, en especial aquellos que se alimentan de plancton e incorporan a las cianobacterias, como el pejerrey.

PRESENCIA

Por último, a través de los estudios de investigación se estableció que existe en la alguna una floración de cianobacterias con predominio de la especie Planktothrix agardhii, productora de cianotoxina. La concentración (cs/ml) supera los niveles guía para aguas recreacionales propuestos por la Organización Mundial de la Salud basados en indicadores de biomasa de cianobacterias, considerándose el riesgo alto".

La postura del Club de Pesca

A través de un comunicado, el Club de Pesca Balcarce informó que acompaña "en la prevención de riesgos por contacto con cianobacterias" a partir del informe difundido por la Dirección de Gestión Ambiental de la Comuna.

Asimismo señaló con respecto al consumo de la población de pejerrey que habita en la laguna que "luego de la última mortandad ocurrida en febrero del 2018, esta comisión trabajó durante estos dos años para recuperar la fauna. Hoy se pudieron observar los primeros resultados de las capturas de esta especie, corroborando a simple viste que el pejerrey se encuentra sano y en buenas condiciones. Esto no garantiza que pueda volver a ocurrir una nueva mortandad a causa de estas cianobacterias si las condiciones del clima durante la etapa de verano favorecen al crecimiento masivo y su floración, liberando sus toxinas que a esta especie le significa la perdida de oxígeno y la muerte por asfixia".

Por último, la entidad aclaró que "hasta el momento no se encuentra ningún análisis ni respaldo de ningún profesional ni de ninguna entidad donde se demuestre que el pejerrey que habita hoy en nuestra laguna no esté apto para el consumo humano.

De parte de nuestra institución se tratará de gestionar el análisis de esta especie y así tener el respaldo de un profesional para poder comunicar de manera responsable a la población".