El expresidente de la Nación, doctor Carlos Saúl Menem, quien falleciera anteayer, visitó nuestra ciudad en más de una oportunidad.

Una de ellas fue en el año 1974, dicen los memoriosos, cuando participó del acto de inauguración de un busto en homenaje a Juan Domingo Perón, que se colocó inicialmente en la plaza Libertad para finalmente ser trasladado a avenida Kelly y 19.

Luego, en la década del ochenta, su nombre comenzaba a posicionarse como uno de los precandidatos a la Presidencia de la Nación por lo que desembarcó en la ciudad para traer su mensaje. Luego compitió en la interna, acompañado por Eduardo Duhalde, en la cual derrotaron a Antonio Cafiero y José Manuel De la Sota. Esa victoria en 1988 lo instaló un año más tarde en la Casa Rosada.

Posteriormente, en 1991, ya siendo Presidente, vino para disfrutar de un fin de semana a puro automovilismo deportivo. El Turismo Carretera corría en el autódromo Juan Manuel Fangio un día antes del cumpleaños número 80 del quíntuple campeón del mundo de Fórmula Uno.

El sábado 22 participó de una serie de actividades como parte del festejo de un nuevo aniversario de la creación de esta ciudad y al día siguiente se dio el gusto, junto al gobernador Eduardo Duhalde, de dar una vuelta por el circuito saludando a la multitud a bordo de un Mercedes Benz descapotable conducido por "El Chueco".

También estuvo aquí en el año 2003 donde participó de un acto político y por la noche se dirigió a una estancia ubicada en las proximidades de San Agustín, que perteneció a Eduardo Casá, donde disfrutó de una cena y una jornada de descanso.

EL RECUERDO DE PEREZ

El actual concejal y exintendente José Luis Pérez mantuvo distintos encuentros de manera presencial y vía telefónica con Menem. Lo recordó con dolor y tristeza. "Era una persona muy afectuosa, muy querible y sencilla. Con sus más y sus menos, fue una década positiva para la Argentina, en la que más inversiones productivas vinieron al país, entre ellas la de McCain", expresó.

Dijo Pérez también que estaba prevista su visita a Balcarce en 1995 para la inauguración de McCain pero no pudo hacerlo por la llegada al país del entonces presidente del gobierno español, Felipe González. Lo representaron Eduardo Duhalde y Carlos Ruckauf.

Un rasgo que destacó Pérez de Menem fue la facilidad que tenía el riojano para recordar los nombres y los rostros con el paso del tiempo. "Lo había visto dos veces y cuando nos encontramos en Canadá, sitio al que había viajado para confirmar la radicación de McCain, se acercó y me preguntó qué estaba haciendo yo ahí", contó.

También recordó que tras perder la elección de aquel año, Menem estando en Chile lo llamó a su celular. "Era él, para saludarme porque tenía ganas de charlar. Imposible no quererlo", reveló.