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Hace dos años y medio se inició la investigación sobre la historia de un balcarceño que muy pocos conocen, quien por su capacidad, idoneidad, valores humanos y habilidad fue considerado héroe en España durante la década del veinte del siglo pasado por su desempeño como aviador en la guerra que ese país libró con Marruecos llamada "guerra del Rif". En su permanente afán por conocer más sobre la rica historia del quíntuple campeón del mundo de Fórmula Uno, Juan Manuel Fangio, y también debido al destino, el Centro de Documentación Histórica de la Asociación Civil "Amigos del Paseo Fangio" que lleva su nombre y que tiene sede en Buenos Aires, descubrió mientras procuraba obtener más datos sobre la figura del piloto y mecánico Manuel Antonio Ayerza, hombre con quien el "Chueco" corrió por primera vez como copiloto en una prueba automovilística, que era un apasionado de los aviones. Fueron expresiones del propio Fangio, según contó Fernando Luis Barragán, Secretario del "Paseo Fangio" a El Diario, las que actuaron como disparador de la investigación sobre los inicios de la aviación en Balcarce y la creación aquí del primer Aeródromo Regional de la provincia de Buenos Aires en enero de 1921. "Ayerza, según contó Fangio, se las ingenió para inventar en su época un mecanismo de alerones que permitía a los aeroplanos realizar maniobras de elevación y descenso con una mayor velocidad. Esta curiosidad y el deseo de encontrar más información referida a Ayerza y a los antecedentes de competencias realizadas entre autos y aviones, justas comunes en esos tiempos, sumado al contenido de una revista rosarina que hablaba de la vida del piloto balcarceño y sus primeros triunfos en Europa, nos condujo a reconocer nombres de quienes fueron los impulsores de la aviación en Balcarce. Podemos mencionar a José Daniel Errecaborde (primer presidente honorario de la entidad), Francisco Clemente Elissamburu (primer presidente), Francisco Labit Miramón (director de la Escuela de Pilotaje "René Caudron"), Fausto Arturo Iglesias, Juan Emilio Scala, Claudio Echarte Moreno y Joaquín Barrueta, entre otros. Todos ellos se desenvolvieron activamente en Balcarce. Asimismo, la investigación confirmaba la relación entre los amantes de los aviones, los autos, las motos y la mecánica", explicó Barragán. De la amplia investigación, que en esta etapa abarca el período 1921 - 1926, en el que nace el Aero Club Balcarce y con él la Escuela de Pilotaje, se logra establecer que Fausto Arturo Iglesias, hijo de inmigrantes españoles, se alistó en la legión extranjera de España junto a otros dos aviadores argentinos, para luchar en la guerra de Marruecos. Participó en más de 150 misiones durante cuatro años. Su desempeño hizo que fuera designado por el gobierno español con el título de Alférez Honorario. En 1925, y después de haber estado internado ocho meses por un grave accidente, el balcarceño Iglesias pidió la baja. Antes de regresar al país, el rey Alfonso XIII lo recibió personalmente en una audiencia oficial para agradecerle por los servicios prestados a la Nación, cuenta la historia.

REGRESO SIN GLORIA

El regreso a su tierra natal no fue el deseado. Según relató Barragán, Iglesias intentó volcar toda su experiencia como aviador aquí pero no encontró apoyo de autoridades de la época por lo que a mediados de 1925 regresa a España, donde le otorgan el alta de servicio y poco después muere el 13 de agosto en una misión militar en Issen Lassen-Marruecos. Sus restos descansan en el cementerio militar de Melilla. "Dejó una huella imborrable basada en sus habilidades como piloto y en su calidad como persona, siendo respetado y apreciado por sus pares y reconocido por el propio Estado Español", añadió.

PROPUESTA

"Fue un héroe en España", afirmó Barragán por lo que desde el Paseo Fangio de Palermo se propuso que el Aeródromo de Balcarce pase a denominarse "Alférez Honorario Fausto Arturo Iglesias". La inquietud ya le ha sido transmitida a la comisión directiva que preside Juan Martín Burgués "en mérito a todos los reconocimientos recibidos por este piloto de aviones balcarceños en vida y tras su fallecimiento" y fue aceptada. Reconoció Barragán que "el deseo de quienes formamos parte del 'Paseo Fangio' y del Centro de Documentación Histórico es que todo el trabajo realizado hasta aquí, como el que se concrete a futuro, sea legado desinteresadamente a Balcarce, nuestro querido distrito, donde están nuestras raíces y donde hemos nacido y crecido bajo el calor familiar".