A partir de hoy alquilar de manera acorde a la legislación en nuestro país pasa a ser muy diferente. En ese contexto, El Diario dialogó con el martillero público Raúl Andrés, para conocer más acera de las modificaciones en el mercado inmobiliario. "En los 40 años que estoy en el mercado inmobiliario, la oferta y la demanda siempre estuvo equilibrada. Sin embargo, estos últimos años desde que se aprobó la ley de Alquileres la demanda superó 10 a 1 a la oferta, algo nunca visto en los años que estoy en esto. Manejo más de 200 alquileres y cada fin de año teníamos entre 20 o 30 propiedades disponibles, y en los últimos años llegamos a tener una o no tener ninguna", indicó Andrés. "Mi intuición es que el mercado inmobiliario va a tener muchísimo más movimiento a partir del DNU, por el hecho de que va a aparecer nuevamente la oferta. No sé si va a quedar equilibrada como en años anteriores, pero la oferta va a acercarse mucho más a la demanda", afirmó.

CAMBIOS EN EL MERCADO INMOBILIARIO

"Veo que, a partir del DNU que empezó a regir en las últimas horas, el propietario, que es el que más estaba haciendo falta en el mercado inmobiliario, está de a poco apareciendo. Antes, el contrato por tres años trababa muchísimo al mercado, ahora que se acortó el plazo hay libertad entre las partes para pactar el plazo. El propietario se siente más liberado y con más posibilidades de no quedar tan desfasado como en los últimos tiempos". Por otra parte, Andrés hizo una mención especial con respecto a los reajustes. "Antes, la ley marcaba que tenía que ser un reajuste anual y ahora es a convenir entre las partes. Esto implica que, al pasar a ser un reajuste trimestral, el propietario no se siente tan desfasado".

El agente inmobiliario explicó que uno de los puntos que resulta beneficioso para el mercado es que ahora los índices se pueden pactar. "Antes nos manejábamos con el ICL (Índice para Contratos de Locación) y con el Índice de Casa Propia, que resultaba contraproducente para los inquilinos porque los propietarios, debido a que ese índice era bajo, iban a sacar más propiedades del mercado inmobiliario generando una escasez de oferta".

MODIFICACIONES EN LOS CONTRATOS

"Otra cosa que también se logró con este DNU es que los contratos puedan hacerse en dólares a convenir entre las partes, cosa que antes no se podía hacer. Y también destaco que, más allá de que el DNU sea aprobado o no por el Congreso, todo lo que se haga a partir de hoy hasta esa fecha es válido, no es retroactivo", sostuvo el corredor público. "Por otra parte, los contratos anteriores al DNU no son modificables, tienen que seguir vigentes con los tres años, el índice anual y el índice de casa propia", agregó.

"Mi intuición es que va a mejorar mucho la plaza, muchas de las casas que quedaron cerradas y otras se pusieron a la venta debido a que no convenía el alquiler van a regresar al mercado inmobiliario. No me arriesgo a decir todas, pero una gran parte van a volver. La incertidumbre está en lo que se prevé para enero, febrero y marzo, ya que se está hablando de un incremento escalonado en la inflación superior al 20%".

QUÉ PASA CON LA COMPRAVENTA DE INMUEBLES

"En los años que estoy trabajando, el mercado inmobiliario siempre lo manejó el dólar. Cuando el dólar sube y no se sabe qué cifra puede alcanzar, desaparece la demanda, a la inversa de lo que pasa con los alquileres. Tenés oferta, pero te falta demanda porque la gente está esperando que suba el dólar, ya que consideran que el valor de la propiedad puede llegar a bajar. En estos momentos en los que estamos con un dólar estabilizado, intuyo que la compra venta se va a empezar a mover nuevamente en el mercado. Una vez que se estabilice, esos dólares que tiene la gente y no los invierte, los puede salir a invertir.

NUEVO ROL DE LA INMOBILIARIA

Por último, Andrés señaló que las inmobiliarias tendrán un nuevo rol a partir del DNU. "En mi opinión, el trabajo de las inmobiliarias a partir de ahora va a ser más complejo, porque antes tenías todo establecido por decreto: el valor del alquiler lo ponía el cliente de acuerdo al ajuste anual y al índice. Ahora la inmobiliaria tiene que tratar, al margen de ser agente inmobiliario, de utilizar la psicología para que ambas partes queden conformes. Porque el propietario, de acuerdo a lo que estima que puede venir en los próximos meses, va a querer un índice que le dé el valor más alto posible. Por otra parte, la persona que va a alquilar, que por más que quiera no va a estar en condiciones, va a querer por lógica algo que esté dentro de su alcance. Ahí va a estar el trabajo de la inmobiliaria, de poder llevar a las partes para que ambas queden conformes, que el locatario pueda cumplir y que el propietario siga alquilando", concluyó.