Juan Rodríguez: «Nos tratábamos bien pero nunca tuvimos una relación de padre e hijo»
Juan Rodríguez o mejor dicho Juan Fangio, hijo del leyendario piloto balcarceño Juan Manuel Fangio, dialogó con el grupo de Campeones sobre la relación que tenía con su padre y con su tío ‘Toto’. Además contó su pasión por el automovilismo y cómo está pasando su cuarentena en la ciudad.
Es ingeniero agrónomo con una maestría en maquinaria agrícola y un doctorado en conservación de granos, nació y se crío en Balcarce, en la misma ciudad que la de su padre. Seguramente la pasión por el automovilismo va por su sangre y eso generó que la unión sea más fuerte con su familia paterna.
A pesar de que le llevó más tiempo ser reconocido por Juan Manuel Fangio y todo el entorno a pesar de lo que una vez le había confesado su mamá Susana. «Mi mamá, Susana Rodríguez, me contó que era hijo de Juan Manuel Fangio», reveló el propio Juan.
Papá y mamá se conocieron cuando yo no había nacido en el año ’44, porque yo nací en el 45. Mi mamá era muy jovencita cuando lo conoció a Juan, ella tenía 15 años y cuando me tuvo a mí lo hizo con 16 años. A partir de los cinco años mi madre ya me había dicho que yo era hijo de él».
Al respecto del vínculo que tenía con su padre, Juan manifestó que no tenían una relación de padre e hijo, pero que a pesar de eso era muy buena. Más allá de que se llevará mucho más con Rubén ‘Toto’ Fangio.
«El vínculo con Juan Manuel Fangio siempre fue bueno, pero la amistad grande yo la tenía con ‘Toto’ Fangio. Siempre hablé cordialmente con él pero nunca hable de afiliación con él. Yo siempre tuve un vínculo muy cercano con ‘Toto’ y con el resto de la familia también, la relación siempre fue buena con toda la familia y eso se ve porque me sigo tratando con los hijos de mi tío, Juan Manuelito y también con los hijos de Carmen Fangio, Ricardo y Carlos Lenci.
Fue un vínculo bueno pero nunca fue intenso, nos tratábamos bien pero nunca tuvimos una relación de padre e hijo».
AUTOMOVILISMO POR SANGRE
En una relación de padre e hijo hay muchas cosas que se transmiten de generación en generación y otras que se llevan en la sangre. Y en una familia «fierrera» el amor por el deporte motor es algo que se siente, se vive y se disfruta.
«Siempre estuve ligado al automovilismo porque me gusta de alma y creo que también corre por la sangre. Mi familia me absorbió la poca mosca que tenía para poder competir, así que corrí una sola carrera en el zonal con un Renault Gordini (1093) donde clasifiqué 27 de 54 autos que había y no corrí nunca más. Pero me hubiera gustado mucho seguir corriendo. En el año 72 había comenzado a realizar una cafetera con ‘Toto’, él me dio todos los fierros para armarla y me ayudaba para hacerla pero a la mitad de la confección me salió la beca para irme a estudiar a Inglaterra. El trabajo y el estudio me cortaron la carrera automovilística, pero si no hubiera corrido los zonales seguramente porque me gusta y me sigue atrapando mucho el deporte motor.
De esto nunca hable con Juan Manuel, ‘Toto’ era incondicional conmigo y me dio todos los fierros de la «coloradita» para hacer la cafetera. Después, a los cincuenta y pico corrí una carrera de karting en el sur pero era por diversión porque me había invitado mi cuñado que corría ahí en los zonales y fui a correr en un circuito de tierra», expresó.
TENER EL APELLIDO DE UN CAMPEÓN
«Es muy interesante porque uno no se da cuenta lo importante que es hasta que pasan ciertas cosas. El año pasado en agosto, viajé con mi actual esposa al lugar donde nació mi abuelo don Loreto Fangio y estuve tres días invitado por el municipio y realmente pasé un muy lindo momento. Me hicieron hasta una reunión especial de autos que hacen todos los años, ellos la hacían a fines de agosto y como yo fui el 11 lo adelantaron específicamente para mí. En ese momento me dieron una copia del acta de nacimiento y me trataron como si fuera Gardel y simplemente porque era el hijo de Juan Manuel Fangio.
Don Loreto era frentista y siempre que yo lo veía le decía chau abuelo y era muy gauchito, cuando iba a la casa, comíamos, charlábamos todos juntos y siempre me trataron muy bien. Nunca tuve ningún problema con nadie de la familia y todo fue a través de ‘Toto’», manifestó Juan sobre lo que significa tener un apellido reconocido en todo el mundo.
Por último, el hijo del quíntuple campeón del mundo y uno de los mejores pilotos de la historia, afirmó cómo está pasando la cuarentena en la ciudad. «Por suerte la situación acá es buena gracias al equipo que tiene el actual Intendente, va todo muy bien ya que hasta el momento no hubo ningún caso».
