Desde la Parroquia San José se están llevando a cabo las tradicionales Misiones Rurales que desde hace años se realizan durante enero en distintos parajes del distrito.

La Escuela Primaria Nº 34, «Lucas Kraglievich», del paraje «El Gliptodonte» fue días atrás el epicentro de la etapa inicial de estas cruzadas que permiten a los lugareños compartir la fe.

«Misionar es llevar el mensaje de Dios persona a persona. Misionar es detenerse para entrar en un ritmo diferente, con otro aroma al de todo el año. El Espíritu Santo nos acompañó en cada instante. No nos dábamos cuenta pero estaba ahí entre nosotros, con nosotros», señalaron en sintonía los integrantes del grupo misionero, quienes en su gran mayoría reavivan año tras año este compromiso, llevar la palabra a los sectores más alejados de nuestro distrito.

«Es increíble la forma en que nos reciben y como nos tratan. Lo que recibimos en cada hogar es muchísimo más de lo que nosotros podemos llevarles. El Espíritu Santo está entre nosotros en cada vivencia que va marcando, dejando una huella en nuestros corazones. Es una gran bendición poder compartir estos días en comunidad», comentó una «experimentada» misionera que año tras año reaviva la gratificante experiencia.

DESDEAYER EN PARAJE LA BRAVA

Ayer dió comienzo la segunda misión, en este caso en el Paraje La Brava, donde permanecerán hasta mañana jueves, cuando se realizará, desde las 19 el oficio religioso de cierre, encabezado por el Obispo Diocesano, Monseñor Gabriel Mestre.

LAS PROXIMAS MISIONES

Posteriormente, en la última semana del mes habrá una cruzada similar en Villa Laguna Brava, culminando el 30 del corriente con la misa presidida por Monseñor Mestre, quien también estará presente acompañando el cierre de la última misión que se hará en la zona de «San Alberto» y tendrá la clausura el 1 de febrero en la Capilla San Antonio, sobre ruta 29.