Antes y después del robo…el miedo

Antes y después del robo…el miedo

"No podemos vivir tranquilos", afirmó Jaqueline Herrera a El Diario

En más de una oportunidad, vecinos de la zona de calles 12 y 41 han acudido personalmente a la sede policial o bien se comunicaron telefónicamente manifestando sus temores por comportamientos y/o presencias extrañas en horas de la noche y, por ende, reclamando presencia policial a manera de prevención porque ese sector no permanecía ajeno a hechos delictivos.

La familia Frutos fue esta vez víctima de la inseguridad. Anteanoche, cuando sus miembros arribaron a su vivienda ubicada en calle 12 número 1247, descubrieron con desagrado que habían entrado ladrones.

Jaqueline Herrera de Frutos agradeció que el hecho delictivo haya ocurrido durante la ausencia de la familia. "Entraron a la casa forzando un postigo de madera y violentando luego una ventana", expresó angustiada.

Ella y su esposo por cuestiones laborales se ausentan a diario durante varias horas por lo que sus hijos adolescentes quedan al cuidado en la casa de un familiar.

Esa conducta la adoptan permanentemente por dos razones: inseguridad y miedo.

Los ladrones se llevaron algunos objetos de oro de la hija del matrimonio que recientemente había cumplido quince años, un bafle, una notebook y algo de dinero, entre otros elementos.

Independientemente de lo material, Jaqueline lamenta mucho más que "hayan violado la intimidad del hogar. No podemos vivir tranquilos. Todo lo que hemos conseguido ha sido trabajando", señaló.

El caso está siendo investigado por personal de la Estación de Policía Comunal.