Con modelos de simulación, mejoraron las decisiones de siembra y riego en el sudeste

Con modelos de simulación, mejoraron las  decisiones de siembra y riego en el sudeste

Nicolas Bronzovich

Los modelos permiten prever si el balance de agua le dará tiempo para regar un trigo, un maíz y luego soja, o no regar trigo y ocupar el riego en un girasol bien temprano seguido de maíz tardío.

Nicolas Bronzovich es ingeniero agrónomo y miembro de la Regional Aapresid Mar del Plata. Radicado en Napaleofú, maneja establecimientos propios y alquilados en el sudeste bonaerense donde realiza agricultura y ganadería con riego complementario. Es un apasionado de la agronomía y las nuevas tecnologías. Fue uno de los técnicos que acompañó el proyecto de Aapresid y el Banco Africano de Desarrollo para la instrumentación de la siembra directa en Guinea.

Tiene un equipo de riego que rota en 4 lotes, apoyándose en softwares como CropWat para decidir según el año: "En una capacitación conocí esta herramienta de FAO para hacer modelos de simulación de balances de agua en cultivos. De libre acceso e intuitiva, es muy útil para programar el uso de riego, planificar rotaciones y parametrizar ciclos y fechas de siembra".

Requiere información básica que incluye variables climáticas, como precipitaciones históricas; de la serie de suelo, como profundidad y capacidad de almacenaje y datos del cultivo como ciclo y duración de cada etapa. "El programa ofrece una base estándar para estimar la evolución del balance de agua y detectar los momentos de estrés. Para mayor precisión conviene ir actualizando datos según riego y precipitaciones, e incluso ajustar la fenología usando softwares complementarios", contó.

MAYOR PROFESIONALISMO

Según Bronzovich, "estas herramientas profesionalizan el manejo. En mi caso, los suelos someros y poco profundos acentúan los déficits hídricos del verano, una estación que desde el vamos ofrece pocas opciones más allá de soja o girasol. Habíamos descartado el maíz en secano hasta hoy, cuando la difusión de los planteos de baja densidad le dan otra chance".

Los modelos permiten prever si el balance de agua le dará tiempo para regar un trigo, un maíz y luego soja, o no regar trigo y ocupar el riego en un girasol bien temprano seguido de maíz tardío.

En maíz, hay productores que apuestan a regar un híbrido corto sembrado temprano y uno largo sembrado tarde. Las fechas de siembra y ciclos permiten separar los períodos críticos (PC) y llegar con el riego a cubrir esos 15 días previos y posteriores a floración, claves en la definición del rendimiento. "Mis suelos y la capacidad de mi equipo no me dejan atravesar todo el PC sin volver a regar. Apoyado en modelos, precios, y costos de oportunidad mi estrategia suele apuntar a regar un trigo y luego mover el equipo a un maíz tardío, que también riego incluso hasta llenado de grano", indicó.

Como muchos en la zona, Bronzovich analiza la viabilidad de rotaciones fina/fina como trigo/cebada, cebada/avena o avena/trigo: "un riesgo es la transmisión de enfermedades y plagas, pero vemos que las alternativas de control logran cubrir". Otro problema es el rebrote del antecesor como maleza. "Aquí una opción es dejar germinar las plantas guachas del antecesor para controlarlas a principio de otoño antes de la siembra del cereal siguiente", subrayó.

En la Red Aapresid de Cultivos de Servicios (CS) apareció incluso la idea de meter una vicia entre un trigo cosechado en diciembre y una cebada de junio/julio. "Una vicia de enero es novedosa, pero justamente es la riqueza que genera el intercambio", explica el productor.

En línea con los CS, Bronzovich repiensa el manejo de los verdeos: "Empezamos a ajustar la carga animal pensando en el doble propósito de estos recursos. Así, además de forraje fomentamos servicios ecosistémicos como captura de agua, control de malezas o aporte de N".

OPCIONES

Los modelos de simulación son también útiles para conocer nuevas opciones. "En lotes regados, donde la extracción de recursos de los cultivos es mayor, trato que la pastura esté presente. Por las mismas limitaciones de suelo, no me animaba a meter alfalfa en las mezclas. Gracias a los modelos este año pruebo mezclas base alfalfa por primera vez", subrayó.

Una desventaja de la herramienta es su incapacidad de predecir impactos del riego sobre la salud de suelo, como salinidad o sodicidad, por lo que es clave conocer bien el sistema antes de valerse sólo de simulaciones.