«Nunca le pagué a nadie para que hablara bien de mí y mucho menos lo voy a hacer para que hablen mal»

«Nunca le pagué a nadie para que hablara bien de mí  y mucho menos lo voy a hacer para que hablen mal»

El Presidente del Partido Justicialista en Balcarce, Teodoro Luis García, manifestó días atrás que iniciará los pasos legales correspondientes para lograr la desafiliación de los concejales que pertenecen al PJ por no cumplir con el aporte que según lo reglamentado deben realizar al Partido.

«Nuestra ley orgánica es muy clara y marca que los concejales tiene que aportar al Partido. Cobran más de 40 mil pesos y no son capaces de aportar 1.500, explicó García puntualizando que retirará las fichas de afiliación para después elevar la situación de cada uno de los ediles al Consejo Provincial, donde se determinará si corresponde su desafiliación.

Ante tales expresiones, El Diario consultó ayer a uno de los señalados por García como «deudor», el concejal del Frente Cumplir José Luis Pérez, para conocer su opinión al respecto, quien señaló que no le sorprendieron los dichos del titular del PJ.

«Es algo a lo que no quiero darle ningún tipo de importancia porque no la tiene. Si nos quieren desafiliar no voy a hacer nada para evitarlo» puntualizó aclarando que tanto él como Mónica Llarena durante los primeros meses tras asumir en el Concejo realizaron los aportes «pero durante esos meses en cada oportunidad que tuvo un micrófono cerca el presidente del Partido no hizo más que criticarnos y ahí decidimos no seguir aportando porque nos parecía ridículo aportar cuando las autoridades partidarias se referían a nosotros descalificándonos».

A la vez aclaró que constantemente tanto él como Llarena ayudan a familias e instituciones sin hacerlo público «y con bastante más dinero que lo que le correspondería al Partido».

Por otra parte, Pérez deslizó que el Partido «tiene muy buen sponsoreo y puede manejarse con mucha tranquilidad».

Al consultarle si el Partido tiene herramientas legales para exigir el pago mensual, el ex intendente explicó que la ley orgánica partidaria así lo expresa, aunque manifestó desconocer si es algo obligatorio.

«Nosotros no teníamos ningún reparo en aportar, pero nunca le pagué a nadie para que hablara bien de mí y mucho menos lo voy a hacer para que hablen mal, sería demasiado tonto de mi parte», sentenció.

«NO HAY QUE PREGONAR LA UNIDAD; HAY QUE PRACTICARLA»

Imaginar ante este escenario una unión del peronismo de cara a las próximas elecciones es difícil. No obstante el edil de Cumplir no lo desecha.

«No hay que pregonar la unidad; hay que intentar practicarla por el momento, al menos con gestos. Nosotros lo estamos haciendo con los bloques del Frente para la Victoria y de Unidad Ciudadana trabajamos en conjunto, tenemos una relación civilizada y lo venimos logrando. Si el día de mañana hay que tejer una unidad veremos, pero la unidad ladrando no se puede alcanzar».

De todos modos no descarta que pueda haber un diálogo con la cúpula partidaria en el orden local. «Siempre hay posibilidades de conversar. Lo que tiene que haber es buena voluntad de ambas partes. Además todos estamos esperando lo que pasa a nivel nacional y provincial» afirmó.

CURANDO HERIDAS

Sobre el final de la charla se le preguntó cuál es la fórmula dentro del peronismo para sanar heridas después de agresiones verbales tan fuertes como se suelen dar, a lo que respondió aclarando que si bien quedan secuelas, «a veces se logra poner los intereses del partido político por encima de los personales y uno hace ciertos renunciamientos sobre esos dichos que pueden haber afectado a uno o a otro en aras del bien del Partido.

A veces se le pide a alguna gente que dé un paso al costado, que hable menos, que no aparezca en la foto, que tome distancia porque no le hace nada bien al Partido. Son cosas que se pueden llegar a conversar, dialogar y acordar. Pero sí es cierto que quedan secuelas, que no es gratis toda esa pirotecnia verbal».