No hubo tiempo para evitar la propagación de las llamas ni poder poner a resguardo elementos. Solo para ponerse a salvo del peligro y esperar la llegada de los bomberos voluntarios para extinguir el siniestro.

Fue ayer, alrededor de las 9, en una vivienda de calle 13 entre 116 y 116 bis, de la familia Pugliese.

De acuerdo a lo señalado por el segundo jefe del cuerpo activo, oficial Walter Frechero, el fuego se habría originado en un sillón, que estaba próximo a un calefactor encendido.

En cuestión de segundos, las llamas se propagaron rápidamente hacia el resto de las dependencias de la vivienda en donde se encontraban descansando tres personas.

Al advertir la presencia de humo se levantaron y salieron a la calle en busca de ayuda, mientras se convocaba a los servidores públicos que arribaron en tres dotaciones con más de una docena de hombres.

Si bien el incendio en pocos minutos fue sofocado y extinguido, los bomberos no pudieron evitar que las pérdidas fueran totales debido a la rapidez con que se extendió a la cocina y las habitaciones. También se vio afectada aunque de manera parcial una casa lindera.

Las pérdidas en la vivienda siniestrada lamentablemente fueron totales: muebles, prendas de vestir, electrodomésticos, etc.

Afectado por la inhalación de humo, una persona fue trasladada en una ambulancia al Hospital Municipal Subzonal para su atención.

AYUDA

Debido a la magnitud del incendio, se hizo presente en el lugar personal de Desarrollo Social, encabezado por su titular Natalia Viera, para ofrecer ayuda a los damnificados por el triste hecho.