Denunció la sustracción de un auto pero otra era la verdad

Denunció la sustracción de un  auto pero otra era la verdad

El estado de ebriedad en que se encontraba le impidió recordar donde había dejado estacionado el automóvil que pertenecía a un cliente, de 72 años, que se lo dejó para que le efectuara una reparación en la calle 30 entre avenida Primera Junta y 103. Es por eso que cuando este último lo fue a retirar, lo primero que se le ocurrió al chapista fue decir que se lo habían robado.

Pero, como dice el dicho, «la mentira tiene patas cortas». El tallerista finalmente confesó ante la Policía que utilizó el Renault 12 durante el pasado fin de semana pero debido a una falla mecánica, optó por estacionarlo.

El hecho de que manejaba en estado de ebriedad no le permitió recordar en qué sitio lo había hecho. Por temor, entonces, le manifestó al dueño del vehículo que se lo habían sustraído.

Finalmente contó la verdad. El auto, en tanto, apareció en calles 30 y 23, sin faltante alguno.

Se labraron las actuaciones correspondientes, dándose intervención a la Fiscalía Descentralizada local.