Una horda de jóvenes desencajados, presumiblemente en avanzado estado de ebriedad.

generaron importantes daños en viviendas y un automóvil en calle 105 entre 22 y 24.

El hecho se registró a pocos metros de la vivienda en la que un día antes había sido golpeada por un desconocido María Duarte.

En este caso, según narró a El Diario Adela Godoy, en la madrugada del lunes, mientras descansaba se vio sobresaltada por gritos que provenían de la calle en tanto una andanada de piedrazos caían sobre su casa rompiendo un vidrio y ocasionando otros daños. También se vio afectado un automóvil estacionado en las inmediaciones y al menos otra vivienda.

El insólito suceso fue denunciado a la Policía que procura ahora esclarecer lo acontecido.